MIS MUSCULOSOS VECINOS.

Enviado desde México.

Mis musculosos vecinos.

       Hace tiempo llegué a esta unidad habitacional, la casa que me tocó era de las últimas así que tenía que pasar por toda la unidad para llegar a mi casa, o de otra manera entrar por el camino, por una vereda que apenas si se notaba y así no vería nadie ni a nadie veía cosa que hacía siempre, no por sangronada si no por no meterme el líos ni intimar con mis vecinos. Siempre he sido un ser muy solitario. A los únicos que siempre miraba era a mis musculosos vecinos, dos varones muy guapos Aldo, un blanquito de estatura media, pero que tenía el cuerpo muy marcado, lo que me llamaba más la atención era su cintura, muy pequeña hasta parecía de mujer, sus piernas fuertes y depiladas, se veían de hombre. Él siempre estaba en casa, al parecer era como la dama de la casa, el otro, Lucas un moreno, súper marcado, con unas espaldas anchas, un torso muy musculoso y alto, más alto que Aldo, es maestro de Educación Física y ambos hacen pesas. El rostro de Lucas esta enmarcado en una coqueta barbita de candado, y no tiene pelos (se corta a rape el pelo, no es pelón) ver su camisa abierta del pecho luciendo su vellos es excitante, a ambos los veo siempre en la vereda ya que como yo, evitan cruzar la unidad, ambos son muy educados y tienen la casa después que la mía…bueno la casa es de Alan quien ahora se es empleado del municipio y sólo trabaja los fines de semana en un turno de 48 horas continuas y descansa 5 días, el es enfermero. Así poco a poco los he ido conociendo. Yo estoy solo, no tengo ni amigo ni amiga, desde que me divorcie estoy tratando de ver que rumbo tomo en la vida. Mi trabajo es monótono: entro a las 9 horas, cocino, y después de que se sirve salgo (soy el cocinero de un conocido restauran) así que vuelvo a mi casa bastante temprano y para no aburrirme horneo pan: si repostería, la cual entrego en varios cafés, no es mucho pero es un extra. Dicen que lo más sabroso es el pastel de moka. Una tarde, uno de mis vecinos llamó a mi puerta, le atendí. Me preguntó si hacía los pasteles para vender y si le podía hacer uno para una reunión que tendrían, les dije que sí, es más, les ofrecí mis servicios para prepararles la cena o el ambigú. Me dijo Alan que el cocinaba algo y que todo sería sencillo. Le ofrecí que si quería lo preparábamos juntos ya que yo tenia la tarde libre, así nació una amistad.

Me pidió el pastel de moka, y pidió que el pan fuese envinado, le dije que si, ya no insistí en la ayuda para no caer en lo grosero. Quedamos que el sábado próximo a las 7 de la noche tendría su rico pastel. Él me comentó que no trabajaría por estar de vacaciones, se despidió dejándome el pago íntegro del pastel. Yo regresé a mi concina a continuar haciendo unas barras de pan de mármol para entrega; un pan económico que le entrego a una conocida y ella vende en su tiendita por rebanadas cada semana. Los viernes me pide le lleve 5: empezamos por uno ahora ya son 5, y el que más les gusta es el de mármol con nuez, pan sencillo y fácil de hacer; basta tener una batidora y saber hornear.    Al fin el viernes llegué de prisa y me apresuré a preparar el pan y para cubrirlo hice una pasta de queso crema y azúcar glas, queda muy suave y es muy rica, me esmeré en la presentación. A las 7 de la noche se los fui a entregar, estaban los dos en short; Lucas sin playera luciendo su pecho; Aldo recibió el pastel y lo dejó sobre una mesa, estaba apurado y me dijo que le faltaba hornear el espagueti y preparar las cremas para hornearlas y ya ni se iba a bañar. Me ofrecí amablemente a ayudarle esta vez si me aceptó, así pase a la cocina y vi que su horno es pequeño así que tarda más. Le dije que llevaría las cosas a mi casa ya que mi horno es profesional y rápido, le prepararía todo y que el se pusiera guapo para sus amistades. Aceptó y Lucas y él me ayudaron a llevar las cosas a mi casa. Ellos se retiraron y yo con la experiencia en ese trabajo preparé todo y horneé rápido. A las 9 les llamé para que me ayudaran a llevar las charolas con los platillos, ellos fueron los dos muy guapos. Por las cosas, me invitaron a asistir y supe que era el cumpleaños de Lucas y además cumplían años de estar juntos: 10 para ser exactos. Me iba a disculpar pero Lucas lo impidió y me comprometió ha asistir. Me metí al baño y me vestí lo mejor que pude. Cerca de las once llegué a su puerta, ya estaba la casa llena de muchos amigos todos con sus parejas. Me ofrecí a servir, yo sólo conocía a los anfitriones, así me pasé parte de la noche. Todos saborearon los manjares, cuando llegó la hora del pastel, les pareció muy sabroso. Aldo les dijo que yo hacia esos ricos pasteles y me apené un poco. En eso uno de los invitados me dio la mano y me recordó que él es cliente del restaurant. Sólo sonreí, después comenzaron a bailar y las copas empezaron a bajarle el contenido a las botellas. Cerca de las dos de la mañana, se cerraron las cortinas, las gruesas cortinas de la casa, y lo que vi no me sorprendió pero me puso al mil: ellos se fueron desnudando, los invitados que quedaban, y comenzaron a acariciarse unos a otros. Yo observaba desde la puerta de la cocina, me quedé absorto,  no sentí cuando llegó hasta mi Lucas, quien me jaló de la mano y ya cerca me quitó la playera, me abrazó y besó mi cuello a la vez que muy diestramente me zafaba el cinturón y hacia que mi pantalón cayera al suelo, y como no uso ropa interior quedé desnudo rápidamente. Mas al sentir sus labios en mi cuello seguí el juego, volví a la realidad al sentir que alguien introducía sus dedos en mi ano, y una boca engullía mi erecto pene. Dos de los invitados se pusieron a darle placer a mis tetas, no sabia qué pasaba, sólo respondía lo mejor que podía a las bocas que se unían a la mía. Así fue mi bienvenida a la casa de mis amigos musculosos. Sólo atiné a ver a la lejos para ser exactos en el sofá a mi amigo Aldo, que tenía un pene enterrado en su lindo culo mientras saboreaba la verga erecta de su marido, a la vez  el marido y el que lo penetraba se unían en un caliente beso. Por donde miraba había gente ya cogiendo, ya mamando. Lo que me dejó de uno; ya que sólo lo había visto en películas porno; fue el dos romano que le hacían a un chavo como de 23 años, se escuchaban gemidos por dondequiera, para ese momento yo sólo tenía a un chavo clavado en mi y mi boca saboreaba el rico pene de un moreno que casi llegaba a mi garganta. La verdad, eso era un bacanal. Después de unas horas sólo quedaba papel higiénico por botado por doquier, condones anudados llenos de semen, culos adoloridos, vergas flácidas, tetas mordidas, nalgas y cuellos marcados por tremendos chupetones…yo recogí mi pantalón y mi playera, me los puse, busqué mis zapatos, estaba en eso cuando sentí que alguien se acomodaba detrás mío, y trataba de bajar mi pantalón. Al voltear descubrí que era el mismo que me jalo a esta aventura orgiástica: sí, era el Profe Lucas…como realmente me gustaba, yo mismo bajé mi pantalón y me empiné para que mi recto recibiera esa morena, larga y gruesa verga. Como estaba ya bastante inflamado sentí un gran dolor, pero me aguante, y él se deslizó dentro de mí y me folló largo rato. De repente él casi gritó y dejó dentro de mi recto sus espermas calientes…en ese momento me di cuenta que me había hecho un “bareback con creampie”…Eso no me fue de mi agrado, me zafé de él y corrí al baño. No me importó que Aldo estuviera mamando y cogiendo con dos policías. Lo que yo deseaba era sacar de mi ano los mocos de su marido, sentí pánico por lo ocurrido; como hay tanta enfermedad; en mi desesperación, tomé la manguera de la regadera y tumbándole la regadera la introduje en mi adolorido recto. Recibí una descarga de agua fría y así deje que entrara mucha en mi, después la vacié en la taza. Repetí esto dos veces más. Me sentí limpio pero no a salvo, me vestí y me marché a mi casa. La verdad no sabes el miedo que tengo, de que una aventura imprudente me contagie de una enfermedad que me puede llevar a la tumba.

    Fui al medico, me ordenó una prueba en VIH, estoy en espera de los resultados, Lucas habló ya conmigo: él me mostro sus análisis y sabe que no tiene nada, y me dijo que si lo hizo es por que sabe que yo no había cogido antes con nadie, y quería que yo supiera que era recibir los mocos en mi, me pidió perdón y quiere que siga con él a escondidas de su pareja, sólo los fines de semana, que él no esta. La verdad me gusta, pero tengo miedo. Por un lado quiero estar con él, pero por otro me siento mal por su pareja. Esperaré 20 días más los resultados espero no tener nada y prometo ser mas consciente de la sexualidad que ahora disfruto.